Pirograbados
Juan Carlos González
Supongo que, como en cualquier arte, quizá el aspecto de su trabajo más placentero para el creador es ver cómo su obra va surgiendo poco a poco de la nada. Es para mí un placer comprobar que un leve retoque en una sombra destaca un volumen, da más vida a una figura, suaviza un contorno. Para mí el pirograbado es más una cuestión de artesanía que de arte; un producto de la paciencia y la habilidad más que de la inspiración o la genialidad. Muchas horas ante la madera. Busco acercarme lo más posible a la perfección en mis obras. Por eso es difícil que un pirograbado me deje completamente satisfecho, y por eso es frecuente que modifique ligeramente algún elemento de mis obras, incluso ya enmarcadas.
Últimos Trabajos
Sobre el Autor
Conocí la técnica del pirograbado por casualidad. En mi época de estudiante universitario, un amigo pirogrababa, y lo intenté. Sin dedicarme a ello más que esporádicamente, fui poco a poco aprendiendo de mis errores, sin maestros ni libros, animado por las personas que veían mis cuadros. La habilidad y la seguridad ha ido llegando despacio, como una cosecha lenta. Cada nueva obra es también una nueva experiencia, un nuevo aprendizaje en un proceso que nunca termina: Ser cada vez mejor.